Miércoles 19.
Mañana nublada que después condicionaría absolutamente la jornada con la lluvia característica de esta zona y además necesaria pues la cosa anda chunga de agua por aquí.
Después de recoger, despedirnos de la señora del Pazo, salimos sobre las 9 y pico, hacia Sarria, cruzándola en dirección a Portomarín. Diego, se levantó un poco indispuesto, seguro por una mala digestión, tuvo que subirse a la furgo en Portomarín. Los demás continuamos el camino bajo la lluvia, unas veces con chubasqueros y abrigados y otras saliendo el sol y despojándonos de todo.
Legamos a Portomarín, allí estaba Buja , esperando en un bar y leyendo el diario deportivo. Nos tomamos unos reconstituyentes y yo aproveché para reparar un radio roto de la rueda trasera, pues se había roto Km antes.
Salimos del pueblo por carretera, hasta encontrar el camino de tierra y ya no dejamos este hasta llegar a Palas de Rei, menos Chano y Juanito, pués no iban muy católicos. Los parajes por este territorio fueron espectaculares, castaños, helechos y vistas espectaculares.
Llegada a Palas de Rei, pero el lugar de hospedaje estaba a unos 10 Km, del pueblo, (As paradas das Bestas), lugar acogedor y trato exquisito.
(Nota: antes de llegar a Palas Buja y Diego nos estaban esperando con unos bocatas, que nos dieron la vida. ¡Gracias Pixa!)
Mañana más y mejor, pues llegamos a Santiago....................
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